Lo realiza el Ministerio de Salud de La Rioja a través del Centro de Investigación de Medicina Traslacional con el laboratorio ELEA.
La cefalea o la migraña está tan extendida en pacientes de todo el mundo que se calcula que genera costos por 14.400 millones de dólares al año, sólo en Estados Unidos. La medicina tradicional no ha dado con tratamientos eficientes y los analgésicos en el mercado acumulan efectos adversos. En ese camino, el cannabis aparece como una oportunidad para acompañar tratamientos y prevenir migrañas.
Ahora el Ministerio de Salud de La Rioja iniciará un estudio clínico para investigar el impacto del aceite de cannabis en casos crónicos.
Con 30 pacientes de esa provincia y los estudiarán durante 12 semanas utilizando dos dosis de aceite de CBD y durante dos semanas posteriores para medir posibles efectos adversos.
«Es un estudio apoyado por el laboratorio Elea que se realizará solo en La Rioja. El estudio piloto se hará con dos dosis (una alta y una baja) con el producto Kanbis, de Elea, de cannabidiol (CBD). La idea es, después de este estudio piloto, hacer algo a nivel nacional para profundizar el estudio. Elea tiene interés no sólo en dar a conocer su producto, sino también en saber si es aplicable a otros usos terapéuticos”, explicó Carlos Laino, director del Centro de Investigación de Medicina Traslacional del Ministerio de Salud de La Rioja.
El laboratorio preparará tres muestras: un placebo y dos aceites con distintas concentraciones, una equivalente a 30 miligramos y otro a 60 para que todos los pacientes tomen el mismo volumen y no se rompa el falso ciego.
La investigación se realizará en conjunto con los doctores José Arroyo y Karina Guevara y la licenciada Sabrina Amaya, con sede en el Hospital Vera Barros de La Rioja.
Para participar del estudio los pacientes deben tener entre 18 y 65 años, tener antecedentes de migraña hace un año o más y tener 15 o más episodios por mes.
La Rioja tiene una plantación de cannabis de alrededor de 10 mil plantas a cargo de la empresa del estado Agrogenética Riojana. Sin embargo, como se demora la producción provincial, el estudio se realizará con el laboratorio que produce Kanbis.
“La gente tiene tanta esperanza en el cannabis porque los medicamentos no funcionan, la gente está esperanzada. Los pocos medicamentos que hay fallan en la eficacia o por los efectos adversos. Así empieza el boca a boca a decir cómo puede funcionar, por ejemplo, para las migrañas. Lo importante es investigar cuál es la concentración y cuál es la dosis”, indica Laino.
La idea de la gobernación es comercializar el aceite a un precio accesible que permita cubrir la producción y entregar sin costo a las personas registradas en Reprocann.
“El tratamiento será con titulación. La titulación de fármacos consiste en el ajuste progresivo de las dosis de los medicamentos suministrados al paciente de acuerdo a las necesidades”, explica Laino. Primero -anticipó- comenzarán con dosis de 0.5 miligramos después del almuerzo y de la cena. Después de cuatro semanas aumentarán a 1.0 miligramos, luego pasarán a 1.5 miligramos en dos dosis hasta el final del tratamiento. Otros continuarán hasta alcanzar tomas de 3 miligramos.
Elea lanzó al mercado Kanbis pero lo anuncian como un antiepiléptico indicado para el tratamiento de las “crisis asociadas con el síndrome de Lennox-Gastaut (SLG) o el síndrome de Dravet (SD) a partir de los dos años”.
Con este estudio buscan determinar si es posible que el cannabidiol sea utilizado de manera preventiva para evitar dolores de cabeza, no para actuar ante episodios agudos y así sumar una nueva posibilidad para su administración.
Periodista, estudió Comunicación Social en la UNLZ.
