El padecimiento, que suma un nuevo caso diagnosticado cada tres segundos en el mundo, podría tratarse con CBD, THC y otros compuestos de la planta. Beneficios y desafíos de un tratamiento que podría cambiar la vida de millones de personas.
El cannabis empieza a ser una opción menos invasiva que algunos medicamentos tradicionales para el tratamiento de ciertas enfermedades o síndromes. La demencia es uno de ellos. Hay profesionales que sostienen que el cannabis, además de aliviar los síntomas, podría ayudar a reducir la muerte de células cerebrales. Todo lo que se sabe hasta el momento, en esta nota.
Primero, los conceptos claros: ¿qué es la demencia? Según la OMS, “es un síndrome que deteriora la función cognitiva (la capacidad de procesar el pensamiento) más allá de lo que podría considerarse un envejecimiento esperado”. En el mundo, los números no son alentadores: en 2015 se registraron 47 millones de personas con este síndrome.
Demencia y cannabis: qué podría generar
Uno de los aspectos es que el cannabis podría ayudar a controlar los síntomas psiquiátricos que generan algunos tipos de demencia. Un estudio de 2016 y otro de 2019 coincidieron en los beneficios de su uso. El primero concluyó que disminuyeron delirios, agitación, irritabilidad, sueño y apatía, y eso derivó en menos angustia en las personas cuidadoras. El segundo, coincidió en que el cannabis puede ayudar a abordar efectos secundarios de la demencia y mejorar el comportamiento de los pacientes.
Algunos pacientes con demencia suelen tomar medicamentos como benzodiacepinas (clonazepam o alprazolam) o quetiapina, que buscan apaciguar reacciones agresivas, pero con el efecto de estar somnoliento o con el ciclo sueño-vigilia alterado entre cuatro y seis horas. Usando cannabis como coadyuvante de tratamiento puede reducirse las dosis de varios psicofármacos y así sus efectos adversos.
El cannabis en aerosol -cuya marca registrada es Sativex- fue probado por primera vez en 2019. Se trata de un compuesto farmacéutico basado en la planta de cannabis que tiene iguales proporciones de CBD y THC, lo que se llama ratio 1:1, que está en estudio preclínico para abordar síntomas vinculados a la demencia de Alzheimer.
El cannabis como alternativa no farmacológica
El cannabis puede ser una opción de tratamiento en los casos en que se requieren drogas si otros métodos no producen resultados. La médica Krista Lanctôt es profesora de la Universidad de Toronto y científica principal del Programa de Investigación de Ciencias del Cerebro Hurvitz en el Centro de Ciencias de la Salud Sunnybrook. En julio de 2018, escribió cómo los problemas de agitación deberían tratarse primero con soluciones no farmacológicas, aunque algunas afecciones requieren medicamentos, incluido el cannabis. Lanctôt comparó soluciones médicas estándar y cannabinoides.
“Los medicamentos que tienden a ser los más efectivos a veces pueden provocar un derrame cerebral o incluso la muerte. Los cannabinoides, por otro lado, interactúan con el cuerpo de manera diferente, lo que significa que podrían ser más seguros y más efectivos en general”, aseguró. Y sumó: “Algunos de los efectos del cannabis incluso podrían ayudar a reducir la muerte de las células cerebrales”.