Historia del cannabis: los primeros tratamientos del siglo XVII con cáñamo para migraña y dolores

Uno de los primeros en recomendarlo fue el médico de la Reina Victoria de Inglaterra. Desde el siglo XVII hasta el prohibicionismo, un repaso por los primeros usos del CBD para la salud. 

La evidencia escrita sobre los usos medicinales del cannabis en occidente no surge hasta el siglo XVII. Continuó incorporándose a los manuales y farmacopeas, que eran los libros oficiales de medicamentos, con las sustancias medicinales de uso más común y las normas oficiales. Allí distintos profesionales destacaron sus beneficios para el tratamiento de migrañas, neuralgias, depresión, ansiedad y hasta dolores menstruales. Incluso lo remarcó el médico personal de la Reina Victoria de Inglaterra.

Primeros registros

En el libro de Anatomía de la melancolía, del año 1621, Robert Burton, un docente de la Universidad de Oxford desarrolla sus conocimientos sobre la melancolía. Muchos de esos conceptos son entendidos hoy como depresión clínica o estrés. Allí menciona a las semillas de cáñamo para tratamientos para la depresión. 

Otro de los primeros registros del uso del cannabis en la medicina occidental lo realizó Nicolás Culepper. Fue un reconocido herborista, que incluyó a la planta de cannabis en su libro El Médico Inglés. Destacaba sus funciones antiinflamatorias y relajantes.

Para esa época, los fitocannabinoides eran obtenidos de las fibras de cáñamo que eran ricas en CBD y contenían poco THC. 

No cura, pero alivia

Ya en el año 1838, William O´Shaughnessy publicó un informe sobre los efectos de la variedad de cannabis después de viajar a Calcuta e investigar sus beneficios para tratar el cólera, el reumatismo, la rabia, el tétanos y las convulsiones. 

Sus publicaciones en revistas de medicina y el resultado de su investigación concluyeron que no podía curar a los pacientes de estos males, pero sí aliviar los síntomas. 

Para fines del siglo XIX el cannabis se incluyó en las farmacopeas británica y norteamericana para el tratamiento del dolor de cabeza.

En 1887, el doctor Sir Morell Mackenzie publicó un artículo recomendando el uso diario de marihuana dos veces al día para el dolor de cabeza crónico, haciendo referencia a la migraña. Dos años después, en 1889, J.W. Farlow describió así el uso de supositorios de marihuana: “Pocos son iguales en su poder sobre los dolores de cabeza nerviosos”.

En 1890, el doctor Rusell Reynolds, el médico personal de la Reina Victoria, publicó en la revista científica The Lancet: “He hallado que el cáñamo de la India es por lejos la droga más útil para calmar dolores y molestias…”. En el artículo compiló 30 años de experiencia y defendió su uso médicos para una variedad de dolencias, particularmente migraña y neuralgia. 

Principios del siglo XX

Entrado el siglo XX, el denominado padre de la medicina moderna, William Osler, recomendó el uso de cannabis para tratar migrañas en su libro “Los principios y la práctica de la medicina”. Y menciona al doctor E. C. Seguin, que “recomienda su uso prolongado”.

Édouard Séguin era el presidente de la Sociedad de Neurología de New York (New York Neurological Society) que también proponía el uso de cannabis para la migraña.

En 1916 Walter Ernest Dixon, profesor de farmacología en el Kings ‘College y la Universidad de Cambridge, describió los efectos terapéuticos del cannabis fumado para el tratamiento del dolor de cabeza.